Hacía tiempo que no lo hacía, pero finalmente decidí cambiar los archivadores de anillas convencionales por unos archivadores con anillas personalizados. Como estudiante de biología en la universidad, todos mis apuntes y apuntes de clase empezaban a parecerse mucho, ¡por no decir que estaban desorganizados! Así que, con un poco de dinero extra en el bolsillo, me dispuse a encontrar la carpeta personalizada perfecta para mí.

 

Recorrí varias tiendas hasta que encontré una que parecía perfecta para mis necesidades: un diseño personalizado con imágenes de animales y plantas autóctonas de donde vivía. La combinación de bellas ilustraciones y funcionalidad era exactamente lo que estaba buscando. Después de hacer la compra, sentí como si esta nueva carpeta pudiera albergar por fin todos mis materiales educativos en un solo lugar.

 

A la vuelta de la compra, la emoción se convirtió rápidamente en ansiedad, ya que me preguntaba si este nuevo sistema funcionará mejor que el que ya tenía. Pero cuando llegó el primer día con los cuadernos llenos de coloridas ilustraciones en lugar de simples páginas blancas, ¡ya no había duda de su eficacia! Mi capacidad de organización mejoró radicalmente de la noche a la mañana; nunca más volvería a perder u olvidar papeles importantes.

 

A partir de ese momento, cada mañana empezaba abriendo mi carpeta personalizada y poniéndome en marcha para aprender algo nuevo, con la seguridad de saber que todo estaba perfectamente organizado en esas páginas El cambio de las carpetas convencionales puede que sólo me haya llevado unos momentos, pero ha tenido un impacto increíble en lo mucho más eficiente (¡y divertida!) que puede ser la escuela ahora que todo está tan bien guardado bajo una cubierta diseñada artísticamente nada menos que por un servidor